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Un desafío de playoff siempre provoca que las tensiones estén a flor de piel. Este viernes 23 de mayo, se calentó el tercer juego entre Industriales y Ciego de Ávila en el estadio Latinoamericano de la capital cubana tras un fuerte intercambio de palabras entre el experimentado jugador Yordanis Samón y el relevista de los azules Leodán Reyes.
Los dirigidos por Guillermo Carmona llegaron a sus predios con desventaja de dos derrotas tras caer por partida doble ante sus rivales en el estadio José Ramón Cepero de Ciego de Ávila.
Yordanis Samón había pegado jonrón en el cuarto inning
El granmense Samón alineó como tercer bate y primera base en la tanda de Ciego de Ávila. Este ha sido uno de los bateadores fundamentales en lo que va de postemporada del beisbol cubano para los dirigidos por Danny Miranda.
En su primera visita al plato, en el capítulo de apertura, recibió base por bolas. Regresó abriendo el cuarto inning ante el abridor Hermes González quien no había permitido hit. Entonces, el excelente toletero le conectó jonrón por el jardín izquierdo que abrió la pizarra para los suyos (3×1).
Volvió al home en el quinto parte alta donde pegó imparable y luego fue remolcado por triple de Leonelkis Escalante que dio la vuelta al marcador (6×5) y puso a ganar a los Tigres.
Leodán Reyes ponchó a Yordanis Samón y calentó
Ciego de Ávila abrió el sexto inning embasando a sus dos primeros bateadores por pelotazo y base por bolas, respectivamente. Tras esto, Industriales llevó al box al veloz Leodán Reyes en sustitución de Fernando Betanzo.
Reyes ponchó a Rodolexis Moreno y retiró a Ronaldo Castillo con elevado. Llegó el turno para Yordanis Samón quien tenía posibilidades de empujar.
El primer lanzamiento del relevista de Industriales fue una recta dura a más de 90 millas por hora según la transmisión de TeleRebelde. Pero este envío casi golpea a Yordanis Samón quien se quedó mirando a Reyes y le dijo algunas cosas.
Ante esto, el diestro natural de Pinar del Río no se quedó callado, le ripostó con palabras fuertes y caminó hacia el home gesticulando con la bola en la mano. El árbitro principal intervino calmó los ánimos.
Entonces, Leodán ganó el duelo. El granmense hizo swing infructuosamente a un rompimiento que fue su tercer strike. Tras esto, el lanzador se acercó gritando obscenidades y señalando sus partes. El público también reaccionó al ponche metiéndose con Samón. Una vez más, el principal intervino, el catcher Andy Cosme también separó a los jugadores y la cosa no fue a mayores.
Ambos jugadores continuaron dentro del juego, a pesar del fuerte roce. Reyes continuó su trabajo una entrada más en la que dominó a sus adversarios y mantuvo el marcador como cuando ingresó, 6×5 favorable a Ciego de Ávila.
El arbitro no debió dejar que llegara a estos extremos, debió expulsar a ambos peloteros. Estos expectaculos dañan la imagen de nuestro pasatiempo nacional. Éso no puede permitirse. Es mi modesta opinión.
Yo creo debio de inmediato expulsar al lanzador de industriales por esa postura antideportiva
Acusar a un equipo por un pelotazo a un jugador contrario dice mucho del mal intencionado que lo escribió, vivimos en un mundo de hombres chismosos y oportunistas en mis tiempos no tendrían cabida
Reynaldo: El mal intencionado es el pitcher
que le tiró el bolazo a Samon, porque el jonrón
se lo habían dado a otro
lanzador que ya no estaba en juego entonces: Quien es el chismoso y oportunista.de éste momento que vivimos.?
Lo ocurrido entre Savón y Leonal Reyes es normal en en Beisbol Cubano. Una bola pegada en un problema, un gesto no obseno es un problema, un mal conteo por el arbitro es un problema. En fin todo es un problema. Falta de cultura beisbolera. Aquí se han visto casos insólitos ( un pichers sentarse en el box porque no le gustó en conteo del árbitro, director tirándole tierra a los ojos del Árbitro principal, bateador con un bate corriendo detrás del picher por todo el terreno porque le rozó el uniforme, pelotero expulsado del juego comiendo sus partes y no abandonar el Dugao, etc, etc…..
eso es parte del juego y de la estrategia del mismo y para samon el respeto incondicional y la admiración de todos los capitalinos